En Soledad (Atlántico), múltiples EPS enfrentan cuestionamientos tras auditorías de la Secretaría de Salud municipal que destaparon serias fallas en la atención a los usuarios. Documentación incompleta, escasez de medicamentos, demoras injustificadas y respuestas burocráticas ineficientes fueron solo algunas de las problemáticas identificadas. Este proceso empezó en abril con Mutualser y se extendió a Coosalud y Salud Total, quienes incluso presentaron planes de contingencia por interrupciones en la entrega de medicinas.
La situación se agrava ante antecedentes recientes: varias IPS fueron clausuradas o incluso selladas por operar sin permisos legales, con equipamiento obsoleto, ausencia de protocolos de bioseguridad y personal sin capacitaciones mínimas.
Estas medidas preventivas buscan asegurar que los prestadores cumplan con las normas vigentes y salvaguardar la integridad de los usuarios.Adicionalmente, la Contraloría alertó sobre EPS que habrían recibido recursos públicos sin prestar los servicios adecuados, lo que rebajó aún más la confianza ciudadana en el sistema local de salud.
Aunque hay iniciativas positivas como jornadas de atención al usuario donde se resolvieron más del 80 % de quejas y reclamos, los pacientes de Soledad demandan resultados concretos y mejoras reales en el sistema.